Cuando miran con los ojos y se pierden en el otro,
cuando paralizan en espejos, y asoman la profunda simbiosis;
Esas veces se preguntan, muertos de miedo y sin pronunciar un bocado,
hasta cuándo seguiremos callando tantas cosas.
Tal vez ese sea su error más grande. Y la excusa perfecta para nuevos encuentros.
Lo saluda, esta vez, con la mirada algo centrífuga en su caricia.
Es que no pretendo ser tu única, le explica, más bien planeo ser distinta.
Tendrás nuevos avisos, anfitrión de coloridas publicaciones.
No desesperéis, por favor, se les ruega. Comienza el vuelo en 3, 2, 1...
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El presente texto fue encontrado entre los papeles de una chica, chica fantástica asegura algún chico inmersionante, a quien horas antes le habían descubierto un par de alas. A veces se entusiasma y se entorpece un poco, nos confiesa el mismo chico. Es que a veces no se reconoce, y tampoco, claro, reconoce bien su cuerpo. Hay veces que no te reconozco. Me gusta mucho conocerte en lo desconocido, encontrarnos una linda (con)figura(ción) a través de unos labios un poco atolondrados.
Hasta cuándo hablaremos de tantas cosas.
(let's be awkward together)
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