miércoles, 26 de diciembre de 2012

Ella usó su cabeza como un re-volver.

(Un dibujito. No es televisión. No es ficción. Imaginación.)


Mirá todo lo que hacías salir.
Ahora no me vengas con equipajes y malos ratos.
Yo no acepto peleas.
Discusión, caras raras, un yanotequiero, y le siguen como ocho tevoyadejar.

Un yanotequiero.

Volver a empezar.



Aunque lo hace sin querer, le gusta olvidarse pedacitos de vida y pretender que mientras se descubren abrazados en la misma cama, recién allí se comienzan a conocer. Ellos. Sus cuerpos. Y ellos.
Le gusta pretender que es un extraño, intentar descifrar el idioma que pronuncia entre pestañas e inventarse déjà vus para armar una historia de vidas pasadas.

Tantas vidas, al final. Con vos.
Si existieran las promesas, ella juraría prometer no olvidarlo. Al menos no esta vez, al menos no esta noche.

Pero no existen.
Don't blow it.

I'll do.

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